Algo de spamin´que recibí por mail.
·ESTO FUE LEIDO EN GOMAESPUMA Y SEGUN ELLOS PASÓ DE VERDAD: Esto realmente sucedió en el I.T.E.S.M. en octubre pasado en una clase de la carrera de Medicina, el profesor estaba hablando de los altos niveles de glucosa hallados en el semen. Una asistente levantó la mano y preguntó:
- "Si le he entendido bien, está Usted diciendo que hay un monton de glucosa, como en el azúcar, en el semen masculino".
- "Es correcto", respondió el profesor.
Levantando la mano de nuevo la chica preguntó:
- "Entonces, ¿por qué no sabe dulce?"
Tras un silencio estupefacto, la clase completa estalló en risas. La cara de la pobre chica se puso rojo brillante cuando se dio verdadera cuenta de lo que, sin querer, había dicho. Cogió sus libros sin decir una palabra y salió de la clase para nunca más volver. Sin embargo, mientras cruzaba la puerta, la respuesta del profesor fue clásica. Totalmente serio, respondió a su pregunta: "No le sabe dulce porque las papilas gustativas para el dulzor están en la punta de la lengua y no al fondo de la garganta".
·Una profesora universitaria estaba acabando de dar las últimas informaciones a sus alumnos sobre el exámen final que harían al día siguiente. Terminó diciendo que no habría excusas para quien no acudiese al exámen, a menos que se tratase de un accidente grave, enfermedad o muerte de algún pariente próximo.
Un gracioso que estaba sentado al fondo de la clase preguntó con ese típico aire de cinismo:
- "De entre esos motivos justificantes... ¿podemos incluir el de extremo cansancio por actividad sexual?"
La clase explotó de risas mientras que la profesora aguardaba pacientemente a que todos se callasen. Entonces ella miró al payaso y le respondió:
- "Eso no es un motivo justificativo. Como la prueba será tipo test usted puede venir y escribir con la otra mano... , o puede usted contestar de pie, si es que no puede sentarse."
·UNA VERDAD MUY GORDA:
a) En Japón se consumen muy pocas grasas y el índice de ataques al corazón en ese país es menor que en Inglaterra y Estados Unidos.
b) Por otro lado, en Francia se consumen bastantes grasas y aun así, el índice de ataques al corazón en ese país es menor al de inglaterra y Estados Unidos.
c) En la india a penas se bebe vino tinto y el índice de ataques al corazón en ese país es menor que en Inglaterra y Estados Unidos.
d) En España se bebe demasiado vino tinto y el índice de ataques al corazón en este país es menor que en Inglaterra y Estados Unidos.
f) En Argelia a penas se hace el amor y el índice de ataques al corazón en ese país es menor que en Inglaterra y Estados Unidos.
g) En Brasil se hace mucho el amor y el índice de ataques al corazón en este país es menor que en Inglaterra y Estados Unidos.
CONCLUSIÓN: Bebe, come y folla lo que te de la gana, es hablar ingles lo que te mata.
·George W. Bush y Tony Blair están en la Casa Blanca cenando. Uno de los invitados se acerca a ellos y les pregunta que de qué están discutiendo.
- "Estamos haciendo planes para la tercera guerra mundial", dice Bush..
- "¡Vaya!", contesta el invitado.
- "¿Y cuáles son esos planes?"
- "Vamos a matar a 400 millones de musulmanes y un dentista", contesta Bush.
El invitado les mira algo extrañado y pregunta:
- "¿Un....dentista?, ¿Por qué un dentista?"
Blair golpea a Bush en el hombro y le dice:
- "¿Qué te dije? Nadie va a preguntar por los musulmanes".
·Un periodista llega a un paraje montañoso para hacer un reportaje sobre la vida del lugar. Aborda uno de los aldeanos y le dice:
- Por favor, cuénteme algo anecdótico de esta región.
El aldeano comienza:
- Una vez se perdió una cabra de nuestro rebaño, y como es la costumbre, nos reunimos todos los de la aldea, bebimos todas las botellas de vino y salimos juntos a buscarla al monte. Cuando la encontramos, como es la costumbre, volvimos a beber y uno por uno hizo sexo con la cabra...
El periodista interrumpe:
- Oiga, este reportaje será publico. Mire, mejor me cuenta algo alegre de la región.
- Bien, una vez se perdió en el monte la mujer de un vecino y, como es la costumbre, todos bebimos y salimos en su búsqueda. Al encontrarla, como es la costumbre, bebimos y cada uno hizo sexo con ella.
El periodista no soportó más y con el fin de evadir ese tema, le dijo al aldeano:
- Mire, mejor cuénteme algo triste. El aldeano, limpiándose una lágrima que comenzaba a salir de sus ojos, continuó:
- Una vez yo me perdí en el monte...